March 17, 2017
No eres el único que siente miedo al recibir una carta del Servicio de Ingresos Internos (IRS por sus siglas en inglés). Para algunos es nada más que un aviso de que van a recibir un reembolso, pero la mayoría piensa en lo peor – una auditoría.
Para el hogar promedio los temores son infundados. Solamente uno por ciento de los contribuyentes es auditado, y el IRS se enfoca desproporcionalmente en los contribuyentes de altos ingresos.
Si eres auditado, no va a ser como lo imaginas. Una auditoría podría centrarse en una sola entrada, crédito o cifra en particular, y es posible que sólo tengas que enviar por correo o por fax una copia de la documentación pertinente, como un reporte de seguro o recibo.
Sin embargo, una auditoría no es divertida. En el mejor de los casos, necesitas tomarte el tiempo para buscar en tus archivos y responder. En el peor caso, tienes que hacer todo eso así como pagar las multas y el interés.
¿Qué puedes hacer para reducir el riesgo de una auditoría? Las auditorías, también conocidos como examinaciones, podrían ser el resultado de una selección aleatoria, documentos incomparables, desviación de las "normas" esperadas para retornos similares o conexión a alguien que está siendo auditado. Pero hay unas cosas que puedes hacer para minimizar la posibilidad de ser auditado.
Trabajando con un preparador de impuestos profesional, como un contador público certificado (CPA por sus siglas en inglés) o un agente inscrito (EA por sus siglas en inglés) podría ayudarte a evitar errores, pero no te garantiza que no vas a ser auditado. A veces te ofrecen, por una cuota, otros tipos de apoyo similares con software para preparación de impuestos en línea. En los dos casos, si tienes que pagar más impuestos, podrían pasarte la cuenta.
No dejes que el miedo te cueste. Algunos contribuyentes evitan reclamar créditos y deducciones legítimas porque temen una auditoría. Eso podría ser una opción costosa. Sólo hay una pequeña posibilidad de que te auditen, y podría ser rápido y relativamente indoloro – especialmente si mantienes buenos registros.
El miedo también lleva a miles de personas a caer víctimas de estafas relacionadas con los impuestos. Los ladrones pueden imitar a un agente del IRS, pero el IRS nunca llamará o enviará un correo electrónico solicitando un tipo específico de pago. El IRS sólo inicia el contacto con los contribuyentes por correo, y si debes dinero puedes elegir entre varios métodos de pago.
En resumen: Aunque no hay forma de garantizar que el IRS no te hará preguntas sobre tu retorno de impuestos, no dejes que el miedo de una auditoría te impida usar los créditos o deducciones que puedes reclamar legítimamente. La presentación de una declaración completa y precisa podría ayudar a minimizar las posibilidades de una auditoría, y si recibes un aviso, puedes resolver rápidamente el problema siguiendo las instrucciones.
Cuestiones Prácticas de Dinero Recientes
Este artículo proporciona información general y no debe considerarse como asesoría salud, legal, fiscal o financiera. Lo más conveniente es consultar con un asesor fiscal o financiero para obtener información específica acerca de la manera en que las leyes tributarias aplican para usted y para su situación financiera en particular.